
La migración a producir anuncios en HTML5 presenta una serie de desafíos:
Los diseñadores y maquetadores no saben o saben muy poco de HTML5 o de JavaScript.
La compatibilidad de nuestro anuncio en múltiples entornos era algo que delegabamos en el plugin de Flash, ahora hay que asegurarse que las piezas funcionan en todos los navegadores y sistemas operativos. Donde tenemos que sumar además la infinidad de dispositivos móviles existentes.
Ya no se trata de un archivo SWF que coloco en una cajita y listo. Los publishers deben permitir recibir paquetes de archivos HTML, CSS, JS, imágenes, etc. Donde los pesos y especificaciones varían considerablemente.
Manejar video, tipografías y animaciones cambia radicalmente, ya no contamos con la poderosa interfaz de desarrollo de Adobe que embebe todo mágicamente.
La realidad es que nada de esto es un problema. Hoy existen soluciones como Sparkflow que resuelven todos estos desafíos y más.
Con una herramienta de creación gratuita basada en la web, por lo tanto no requiere la instalación de ningún software ya que se usa directamente desde el navegador. Presenta una interfaz visual similar a cualquier herramienta de diseño (como Photoshop) y abstrae al diseñador de tener que lidiar con código.
El desarrollo de componentes compatibles y optimizados con todos los entornos existentes y la certificación con publishers, exchanges y todo tipo de fuentes de inventario está centralizado y no es necesario realizarla cada vez. Y por último, al tratarse de una plataforma 100% agnóstica permite adaptar, distribuir y medir un mensaje publicitario en forma consistente a través de todo tipo de dispositivos, navegadores, sistemas operativos y apps.